La medida busca disuadir a Irán a seguir secuestrando buques mercantes en la zona. Pero también podría generar más tensión. Los detalles.
El ejército de Estados Unidos está considerando asignar personal armado en barcos comerciales que navegan por el Estrecho de Ormuz, en una medida sin precedentes para evitar que Irán incaute y acose naves civiles, dijeron cinco funcionarios estadounidenses a The Associated Press.
Desde 2019, Irán se ha apoderado de varios barcos en el estrecho, la boca angosta del Golfo Pérsico, como parte de sus intentos por presionar a Occidente en las negociaciones sobre su infructuoso acuerdo nuclear con las potencias mundiales. Asignar soldados estadounidenses en barcos comerciales podría disuadir aún más a Irán de apoderarse de navíos —o aumentar aún más las tensiones.
Mientras la idea se analiza, más de 3.000 marineros y marines de Estados Unidos han llegado al mar Rojo, en Oriente Medio, en el marco de un despliegue anunciado en julio por Washington para hacer frente a los continuos intentos de Irán de apoderarse de barcos comerciales en la zona.
La Quinta Flota de Estados Unidos, con sede en Baréin, anunció en un comunicado publicado este lunes que el contingente llegó a la zona el domingo, a bordo del buque de asalto anfibio USS Bataan y USS Carter Hall, que transitaron por el Mediterráneo y accedieron al mar Rojo a través del canal de Suez.
Este despliegue pretende reforzar la presencia de Estados Unidos en la región, con «activos navales y de aviación adicionales, así como más marines y marineros» para «una mayor capacidad y flexibilidad marítima».
Según Estados Unidos, «en los últimos dos años, Irán ha atacado, incautado o intentado incautar casi 20 buques mercantes de bandera internacional en el área de operaciones» del Comando Central de EE.UU.
Marines en barcos mercantes
La presencia de soldados armados de EE.UU, en barcos mercantes, en tanto, representaría un compromiso extraordinario en Medio Oriente por parte de las fuerzas estadounidenses cuando el Pentágono intenta enfocarse en Rusia y China.
Estados Unidos ni siquiera tomó ese paso durante la llamada “Guerra de los petroleros”, que culminó cuando la Marina de Estados Unidos y fuerzas de Irán sostuvieron una batalla naval de un día en 1988 que fue la más grande de la Marina estadounidense desde la Segunda Guerra Mundial.
El plan, del cual los funcionarios ofrecieron pocos detalles, se produce cuando los miles de infantes de marina y marineros a bordo tanto del USS Bataan y el Carter Hall llegaron al Golfo Pérsico.
Esos infantes de marina y marineros podrían proporcionar la columna vertebral para cualquier misión armada en el estrecho, a través del cual pasa el 20% del petróleo crudo del mundo.
La misión de Irán ante Naciones Unidas no respondió de momento una solicitud de comentarios de la AP sobre la propuesta de Estados Unidos.
Los cinco funcionarios estadounidenses, que hablaron bajo condición de anonimato para discutir la propuesta, confirmaron los rasgos básicos de la iniciativa. Enfatizaron que no se ha tomado una decisión final y que continúan las discusiones entre los oficiales militares estadounidenses y los aliados de Estados Unidos en el Golfo Pérsico en la región.
Un proceso complejo
Las autoridades dijeron que los marines y los marineros de la Armada brindarían seguridad solo a pedido de los barcos involucrados.
Un funcionario describió el proceso como complejo y dijo que cualquier despliegue probablemente también requeriría la aprobación del país bajo el cual está abanderado el barco y el país bajo el cual está registrado el propietario. Hasta ahora, eso aún no ha sucedido y podría no suceder por algún tiempo, dijo el funcionario.
En el Pentágono, al Brigadier General Pat Ryder Brig. se le preguntó sobre los planes y solo dijo que no tiene anuncios que hacer al respecto. Sin embargo, en términos más generales, señaló que se han desplegado barcos, aviones e infantes de marina adicionales en la región del Golfo, lo que facilita responder más rápidamente a cualquier provocación iraní.
Associated Press y EFE